Bueno pues, el fin de semana pasado fui al famosísimo sitio conocido como La Cima (y sobreviví) allí en la Ciudad de México a buscar al pretendido Sierra Madre Sparrow, y aunque no vi al condenado, si pude conocer su hábitat y a una chica que trabaja con él… Ahí es donde la cosa se pone interesante, ella (la chica) habla con muchísima pasión y cariño del gorrión y de su ecosistema, pero también con mucha nostalgia por la situación que vive. Así que ahí arriba entre los pastizales y los pinos, uno se puso a contar historias de aves y la otra, a cantar una canción que compuso al pequeño y condenado pájaro que no ví. En fin, esa canción (en parte) me dejó muy conmovido, pero regresando a Xalapa solo pude recordar las dos primeras líneas, y como no podía quedarme quieto ante cosas tan lindas, compuse mis propia historia del gorrión para cantar, y es la siguiente:
Que susurra ese gorrión
Entre los campos de altura
Canta, vuela y te murmura
Si le prestas atención
Dice su triste canción
De un tiempo en tiempos pasados
De un mar de pasto dorado
Sobre un cielo azul celeste
Que dice al viento del este
Creo que ya me han olvidado
Él cree que lo han olvidado
Su mar grande ahora es chiquito
Y se siente un pájarito
Pequeño y acorralado
Canta y mira para un lado
No encuentra una compañera
Llora él, llora la sierra
Llora el pino, el oyamel
Y hasta llora el cascabel
El destino de su tierra
Ella sube al monte a ver
Al gorrión que vive allí
Ve al conejo, al colibrí
Y los empieza a querer
Ya los quiere defender
Le pide al monte su canto
Y el monte le da otro tanto
Le da sueños, le da historias
Para que sea su memoria
La defensa de su encanto
Gorrión no te han olvidado
No llores por tu futuro
Que si bien no está seguro
Tampoco está condenado
Ahora estás acompañado
Ella te sabrá querer
Nada tienes que temer
Y aunque yo no estoy allí
Me volveré colibrí
Para irte a conocer
como ven, no solo habla del gorrión, pero tiene que ver con aves y me gusta bastante